Cumpliendo con el mandato de la presidenta y comandante General de las Fuerzas Armadas de Honduras, Xiomara Castro, y tras superar rigurosos procesos de formación, la Policía Militar de Honduras y el Instituto Nacional Penitenciario (INP) llevaron a cabo la graduación de 558 nuevos agentes penitenciarios y el ascenso de 30 cadetes a oficiales penitenciarios, quienes están ahora listos para enfrentar los desafíos en materia de seguridad y orden en los centros penales del país.
La ceremonia, celebrada en el marco de este importante evento, fue presidida por el viceministro de Defensa Nacional, Orlando Garner Ordóñez, en representación de la ministra de Defensa, Rixi Moncada.
Asimismo, estuvieron presentes el jefe del Estado Mayor Conjunto, general Roosevelt Hernández; el comandante de la Policía Militar del Orden Público (PMOP) y presidente de la Comisión Interventora del INP, coronel Ramiro Muñoz; y miembros de la Junta de comandantes de las Fuerzas Armadas.
A partir de este día, los nuevos oficiales y agentes penitenciarios asumen su labor bajo la Ley del Sistema Penitenciario Nacional, guiados por la dirección del INP.
Esta formación integral es parte de la estrategia del Gobierno de la República para restablecer la seguridad y el orden en los centros penales, un compromiso que se viene materializando desde la intervención iniciada el 1 de julio de 2023.
Los graduados han aprobado rigurosos procesos teóricos y prácticos en diversas áreas, entre las que destacan: identidad y doctrina, derecho penitenciario, gestión y administración penitenciaria, derechos humanos, tratamiento penitenciario, seguridad penitenciaria, laboratorios de operaciones penitenciarias, informática y práctica profesional.
Los nuevos oficiales penitenciarios se caracterizan por poseer un perfil integral que no solo refleja sólidos conocimientos académicos, sino también habilidades prácticas y éticas fundamentales para desempeñar su rol con excelencia dentro del sistema penitenciario del país.
Hasta la fecha, como parte de esta intervención, se han graduado un total de 2,765 agentes penitenciarios y 58 oficiales penitenciarios, quienes tienen la responsabilidad de operar y controlar los 25 centros penales en Honduras, contribuyendo de manera decisiva a la mejora de la seguridad en estos espacios.
El fortalecimiento de los recursos humanos en el sistema penitenciario es una pieza clave en el proceso de reforma y modernización del sistema de justicia penal en Honduras, impulsando un ambiente más seguro tanto para los internos como para el personal que labora en los centros.
Cortesía: Poder Popular.