Guatemala: Juego de poder entre Bernardo Arévalo y fiscala general se intensifica

El presidente de la República de Guatemala, Bernardo Arévalo, y la fiscala general, Consuelo Porras, libran una lucha de poderes en el país centroamericano.

La máxima cabeza del Poder Judicial es una piedra en el zapato del mandatario desde que este logró avanzar a la segunda ronda electoral con el Partido Semilla, en el segundo semestre del 2023.

El Ministerio Público inició investigaciones sobre la agrupación política, a las que el hoy mandatario siempre tachó de persecución y le recalcó a sus partidarios “que lucharían por defender la democracia”.

Arévalo asumió la presidencia de Guatemala el pasado mes de enero y desde entonces tiene que lidiar con Porras, uno de los últimos eslabones del gobierno del expresidente Alejandro Giammattei, quien poco antes de entregar la banda presidencial extendió el nombramiento de la fiscala hasta el 2026.

Entre demandas y la búsqueda de modificaciones legales, Arévalo y Porras intensifican sus ofensivas. Para Juan Diego Godoy, analista político, comunicador y escritor guatemalteco, este es un “mensaje político” y una “demostración de poder a lo interno del país”

Este amparo llegó luego de que, por primera vez, el presidente Arévalo arremetiera contra la fiscala, acusándola de ser la representante de la ola de corrupción en Guatemala. En el documento, la fiscala señaló que ella representa una institución completamente autónoma, el Ministerio Público, y que se sentía atacada por el mandatario. Por lo tanto, la Corte de Constitucionalidad recordó a Arévalo que no puede afectar a la oficina del Ministerio Público.

Tras esto, Porras afirmó que Arévalo violó ese amparo porque continúa persiguiéndola.

“Aquí la batalla se intensifica. El presidente emite un comunicado en el que califica de espuria esta solicitud de antejuicio y vuelve a recalcar que el Ministerio Público no tiene credibilidad. Así, el tema regresa otra vez a los focos”, explica Godoy.